Este año 2011 comienzó con una noticia realmente sorprendente de la que se ha hecho eco en la mayoría de medios informativos del planeta. Se trata de, literalmente, una lluvia de mirlos negros muertos que cayó sobre la ciudad de Beebe (Estados Unidos), en la noche de Año Nuevo.
Según informaba Europa Press a distintos diarios, unos 5.000 mirlos negros caían fulminados sobre un pequeño pueblo del estado de Arkansas, Beebe, mientras los ciudadanos festejaban el cambio de año. Al amanecer, la sorpresa fue mayúscula para todos cuando contemplaron a miles de pájaros muertos sobre las aceras y los tejados de las casas.
Los cadáveres de algunos de los pájaros han sido trasladados a diversos laboratorios para clarificar las causas de su muerte, mientras tanto, las especulaciones sobre la sorprendente muerte masiva de aves ya comienzan a circular; algunos dicen que si fue causado por los fuegos artificiales disparados durante el cambio de año, otros opinan que el granizo que cayó en días anteriores es el culpable de la debacle aviar, otros ya ven en el caso un síntoma claro y profético de que se nos acerca el final…La cuestión es que por sorprendente que parezca, no es la primera vez que ocurre algo similar. Según parece, a finales de 2008 cerca de 5000 estorninos caían muertos de un modo similar en la pequeña comunidad rural de Griggstown, en Nueva Jersey. En esta ocasión las autoridades, o más concretamente el departamento de agricultura de Estados Unidos fue el culpable del “exterminio selectivo” de estorninos, ya que se habían convertido en una plaga que arrasaba con los cultivos.
Remontándonos un poco más en el tiempo, hasta 1896 y también en EEUU encontramos otra lluvia de pájaros muertos en la región de Baton Rouge, en Luisiana, en esa ocasión y sin que nadie encontrara razón alguna, llovieron todo tipo de aves. En 1969, en la ciudad de St.Mary´s City, en Maryland, también se registró una lluvia de pájaros muertos, con la curiosidad de que todos eran Canarios.
En enero de 2007, cientos de pájaros muertos eran recogidos de las calles de Esperance, un pequeño pueblo en Australia. La zona fue catalogada como “zona de desastre natural” y se barajó la posibilidad de que el causante de la mortandad fuese una toxina natural…
En 1907, en los alrededores del Palacio Real de Madrid y tras una tormenta espectacular, llovieron cientos de codornices muertas. Años antes, en 1880, otra lluvia de codornices había acontecido en Valencia…
En definitiva, las causas pueden ser varias, pero lo más probable es que las perturbaciones atmosféricas, la desorientación y probablemente la contaminación sean las causas principales de la muerte de grandes bandadas de aves.
¿¿¿Tendrá todo esto que ver con el temido fin del mundo???
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